Fernando Belasteguín, conocido en el mundo del pádel como Bela, ha dominado el ranking del World Padel Tour, manteniendo su posición como primer jugador del mundo durante 16 años consecutivos. Nacido en Pehuajó, Argentina, descubrió su pasión por el pádel desde muy joven, de la mano de su histórico entrenador Roberto Díaz. A partir de ese momento dedicó su vida a este deporte, convirtiéndose en un icono y modelo a seguir para muchos jóvenes deportistas.
Comienzos a una edad temprana
La carrera de Bela comenzó en 1995, cuando reconoció su vocación por el pádel. Su dedicación y talento se hicieron evidentes de inmediato y, a lo largo de los años, ha construido una impresionante lista de honores, que culminó con el dominio absoluto en el circuito mundial.
Partiendo de su Argentina natal, Bela ha viajado innumerables veces para competir en los torneos más prestigiosos, enfrentándose a los mejores jugadores y ganando títulos en varios países.
A lo largo de su carrera, Bela ha logrado resultados extraordinarios. Ganó 230 títulos y llegó a 286 finales. Este increíble viaje le ha consagrado como uno de los mayores campeones de la historia del pádel. Su compromiso, su perseverancia y su capacidad para superar cualquier obstáculo lo han convertido en un símbolo de excelencia.
Una inspiración de pasión y dedicación al mundo del pádel
Bela no sólo es un campeón por sus extraordinarios números, sino también por su historia personal de sacrificio y dedicación. Desde el principio, enfrentó importantes desafíos, incluidos los altos costos y sacrificios necesarios para participar en los torneos. Para mantener a su familia, Bela vendía palas de pádel en las gradas. Su determinación y el apoyo de grandes jugadores le han ayudado a alcanzar alturas increíbles. Su historia inspira a muchos y su apuesta por el pádel sigue influyendo positivamente en el mundo del deporte.


